El bien de la vida vuelve a nosotros solo si hacemos el bien
Si hacemos buenas acciones hacia los animales, algún día obtendremos la misma respuesta de ellos. Esto sucedió con un amable hombre llamado Richard, quien decidió adoptar un perro de un refugio, y cuando se encontró con Buddy, un dulce perro, que iba a ser sacrificado, se apresuró a salvar su vida.
Adoptó al cachorro sin dudarlo y se hicieron amigos inseparables. Todo parecía genial hasta que el inteligente canino vio algo extraño en la cabeza de su dueño.
No dejó de ladrar para llamar la atención del hombre. Finalmente, Richard entendió que algo andaba mal con su salud y decidió ir al médico para un chequeo.
Sorprendentemente, resultó que Richard tenía cáncer de piel. Afortunadamente, los médicos lograron salvarle la vida con una cirugía.
Buddy salvó la vida de su humano debido a sus fuertes sentidos, y fue la respuesta a la bondad del hombre hacia él.
