Emma reveló que al comienzo de la enfermedad de Bruce, cuando nadie entendía aún qué estaba pasando, de repente comenzó a tartamudear. Al principio pensó que se trataba de una recurrencia de su tartamudez infantil, ya que el actor de 69 años tuvo dificultades para hablar durante su adolescencia.
“Para Bruce, todo empezó con su forma de hablar”, explicó Emma. Hace dos años, la familia del actor anunció que sufría afasia, lo que lo obligó a alejarse de la actuación. Un año después, se reveló que le habían diagnosticado demencia frontotemporal, una afección que a menudo presenta síntomas similares a la afasia.
Emma admitió que al principio no se dio cuenta de inmediato de su tartamudez, ya que ya había tenido problemas de habla de forma intermitente. “Cuando su habla empezó a cambiar, parecía que era solo una parte de la tartamudez; era simplemente un Bruce normal. Nunca hubiera pensado que esto pudiera ser una forma de demencia en una persona tan joven”, lamentó.
La pareja tiene dos hijas: Mabel, de 12 años, y Evelyn, de 10. Las niñas notaron los problemas de su padre incluso antes de que se revelara su diagnóstico. “Nunca traté de endulzarles nada. Crecieron y la condición de Bruce empeoró con los años. No estoy tratando de protegerlas de esto”, explicó.
Bruce Willis también cuenta con el apoyo de su exmujer. Demi Moore lo visita con frecuencia con sus hijas, asegurándose de que no se quede solo. Su hija, Tallulah Willis, ha recibido un diagnóstico complicado: le detectaron autismo a los 29 años.