En el año 2000, este veterano chino, que perdió ambas piernas, comenzó a plantar árboles. A lo largo de los años, ha plantado 17.000 árboles, convirtiendo una montaña en un bosque. Te sorprenderás cuando veas cómo plantó estos árboles sin tener piernas.
Cuando era niño, mi abuelo a menudo me hablaba de héroes, no los de los libros, sino los reales que hacen cosas increíbles sin esperar nada a cambio.
Una historia que me dejó una profunda impresión fue la de Ma Sanxiao, un hombre de 70 años con una determinación extraordinaria.
Ma Sanxiao, originario de Maiyu, un pueblo de China, comenzó su increíble viaje en el año 2000. Tras perder sus piernas, decidió plantar árboles para alimentar a su familia. Lo que en un principio era una necesidad se convirtió en la misión de su vida.
La región, situada cerca de las montañas Taihang, sufría una deforestación masiva que amenazaba con convertirla en un desierto. Pero Ma no se dio por vencido. A lo largo de los años, plantó 17.000 árboles, lo que contribuyó a restaurar el ecosistema de la región y evitó un desastre ecológico.
Cada mañana, a las 5 de la mañana, se sube a su tuk-tuk, se dirige a las zonas afectadas, se quita las prótesis y se arrastra para plantar árboles. No es un trabajo fácil; ha sufrido muchas heridas, pero nunca se rinde.
En 2008, el gobierno reconoció sus esfuerzos y le brindó ayuda financiera. Pero para Ma, el dinero no es lo más importante. Simplemente quiere devolver a la sociedad lo que perdió y se siente seguro entre los árboles que plantó, como si fueran parte de él.
