Una mujer se sorprendió cuando un perro retriever comenzó a aparecer regularmente en su casa. El perro estaba claramente bien cuidado: bien peinado, no tenía hambre y llevaba collar. Ella simplemente se acostaba en la alfombra cerca de la puerta y se quedaba dormida tan pronto como entraba a su casa. Al día siguiente ocurrió lo mismo; El perro regresó, la saludó y durmió tranquilamente. Este patrón continuó durante varios días y la mujer sintió curiosidad por saber por qué el perro seguía visitándola.
Un día, después de otra siesta tranquila, la mujer encontró una nota pegada al collar del perro. La nota explicaba que el perro tenía una familia y estaba bien cuidado, pero había que acostumbrarlo a su casa. El dueño del perro admitió que el retriever venía con frecuencia a dormir y descansar. La nota dice: “Este perro tiene seis niños en casa, el más pequeño de poco menos de tres años. “Él solo quiere descansar y me preguntaba si estaría bien que él también duerma la siesta en tu casa mañana”.
Intrigada, la mujer decidió escribir una respuesta y la pegó al collar del perro: “Me gustaría saber quién es el dueño de este dulce perro. ¿Sabías que tu perro visita mi casa todos los días, duerme unas horas y luego se va de nuevo?
Las visitas del perro continuaron durante varias semanas y la mujer finalmente aprendió más sobre su familia, lo que la llevó a una sorprendente comprensión del extraño comportamiento del perro.