La estrella de Hollywood ha perdido peso notablemente últimamente. Como resultado, Angelina ha estado usando ropa holgada que cubre su cuerpo casi por completo. Una fuente cercana a la actriz reveló que sus hijos están horrorizados por lo mucho que ahora parece un esqueleto andante. Están obsesionados con la idea de que Jolie suba de peso.
Los seis hijos que Angelina tuvo con Brad Pitt —Maddox, de 23 años; Pax, de 21; Zahara, de 20; Shiloh, de 18; y las gemelas Vivienne y Knox, de 16— la están ayudando a ganar los kilos que tanto necesita. Están decididos a darle más peso.
Jolie fue vista recientemente en un supermercado en Los Feliz con su hijo Knox. Su carrito estaba repleto de bolsas de papel marrón con comestibles. En otra ocasión, Knox y Vivienne acompañaron a la actriz a la misma tienda a comprar comestibles y otros artículos.
Juntos, los niños van de compras al mercado y la tientan con dulces de la charcutería y la panadería, y también hacen picnics familiares todas las noches para ayudar a mamá a subir de peso. Angelina todavía se ve delgada, con los tobillos como palos, pero bajo la atenta mirada de sus hijos, come algunos bocados más, dijo la fuente.
En junio pasado, los expertos coincidieron en que la estrella de «Maléfica» pesa menos de 45 kilogramos, una cifra preocupante considerando su altura de 169 cm, lo que sugiere una alta probabilidad de anorexia. «La probabilidad de que Angelina ya padezca osteoporosis es extremadamente alta. Presenta una pérdida de grasa severa, que casi siempre se asocia con una pérdida significativa de masa muscular y ósea. Sospecho que pesa menos de 45 kg, aunque para una apariencia saludable, debería pesar al menos 51 kg».
Una amiga cercana de la actriz ganadora del Óscar compartió que el estrés causado por el mediático divorcio de Brad Pitt le ha afectado negativamente su ya poco apetito. «Todos sus hijos comen con normalidad, pero Angelina siempre se ha restringido en cuanto a la comida. Lo único bueno que Brad hacía era obligarla a comer más. Pero desde su separación en 2016, los niños sienten que no se cuida, lo que los ha vuelto aún más protectores con ella», añadió la amiga.