La estrella de Van Helsing, Kate Beckinsale, de 51 años, capturó la atención del público al lucir su figura con un look atrevido. La actriz posó con un mono transparente decorado con pedrería y botas altas.
Ella compartió imágenes del proceso de filmación en su blog personal.
“Te ves muy frágil, ¿quizás deberías ver a un médico?”, “Espero que estés recibiendo todo el apoyo y la ayuda que necesitas”, “Ozempik te envía sus saludos”, comentaron los suscriptores de la estrella.
Han surgido rumores en redes sociales que vinculan la dolorosa delgadez de la actriz con el uso del medicamento «Ozempic», popular entre las celebridades. Originalmente, estaba destinado a tratar la diabetes tipo 2.
Beckinsale ha negado previamente las acusaciones, alegando que su drástica pérdida de peso se debió a un estrés severo. La situación empeoró cuando a su madre le diagnosticaron cáncer, lo cual afectó profundamente a Kate. Poco después, estuvo hospitalizada durante casi dos meses y afirma que aún no se ha recuperado por completo.